Llenar de flores las tumbas de nuestros difuntos es una tradición que remonta a los orígenes de la Humanidad. De hecho, ya en la prehistoria se ofrendaban adornos florales a los fallecidos, como atestiguan los restos vegetales hallados por los arqueólogos. En las grandes religiones monoteístas existen prácticas muy diversas. Por ejemplo, los musulmanes de Francia no regalan flores, sino que ayudan a la familia a costear el funeral e incluso la repatriación del fallecido de manera solidaria. Del mismo modo, según la tradición judía, no se depositan flores en una tumba, sino que se coloca una piedra, menos perecedera por naturaleza. Sin embargo, el Día de Todos los Santos es una celebración importante en el calendario cristiano, que se festeja llevando flores al cementerio. Estas flores, símbolo de la vida efímera y del cariño hacia los difuntos, deben ser cuidadosamente elegidas y cuidadas con esmero para que duren.

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¿Qué flores elegir para decorar una tumba?

flores para decorar una tumba

Decorar una tumba con flores es una manera sensible, íntima y sincera de llevar a cabo el duelo por nuestros difuntos y honrar su recuerdo. Es importante buscar ramos de flores de tumba, coronas y composiciones especiales que hagan alusión a la vida, personalidad y edad de tus difuntos. Esta personalización de las flores de tumba comienza con las flores elegidas para el funeral. La palma de flores del ataúd, a menudo una combinación de rosas, lirios y gerberas, permite expresar las condolencias de seres queridos, familiares, compañeros o amigos en su cinta de raso. La corona funeraria es también una composición floral especial que homenajea a los difuntos.

Puedes decidir, con ayuda de tu florista, qué tonos se adaptan mejor al homenaje que quieres rendir con las flores de tumba. La elegancia y el encanto discreto de los tonos pastel y los tonos claros honrarán de manera perfecta a una mujer, mientras que los colores más contrastados están más indicados para hombres.

Los tonos blancos y los colores pálidos se utilizan generalmente para el funeral de un niño o joven, ya que simbolizan la inocencia pura.

La simbología de las flores de tumba es muy importante y su lenguaje está lleno de significados. Las flores más clásicas, en centros de flores para tumbas, coronas u otros arreglos fúnebres, expresan sentimientos profundos que todo el mundo comparte. Las rosas siguen siendo una flor de tumba muy presente en el cementerio, usada para decorar una tumba con flores el Día de Todos los Santos o cualquier otro día. Las rosas rojas, en particular, significan amor conyugal y apasionado, pero un arreglo floral basado en rosas blancas tendrá un efecto espectacular en un cementerio.

Del mismo modo el lirio, que simboliza la pureza, es una flor muy presente en los entierros y en las composiciones florales para tumbas. Tanto como el clavel, que siempre se ha asociado con la muerte y que en los últimos años está aportando diversidad a los ramos de luto del cementerio, que ahora combinan claveles de todos los colores, desde el rojo hasta el amarillo. 

La tradición milenaria de decorar una tumba con flores o una planta ha dado lugar, a lo largo de los siglos y de las creencias populares, a toda una simbología relacionada con los cementerios, que se refleja en el paisaje de los camposantos. Entre las más conocidas se encuentran el ciprés, que representa el dolor, la hiedra, que significa la conexión y el apego y el Arum o Flor de Primavera, que es un reflejo del alma, mientras que la orquídea es una manifestación de amor intenso.

Menos conocidos por su significado son el iris azul, símbolo de ternura, y el helecho, emblema de sinceridad. Mientras que la saponaria recuerda un dolor intenso.

¿Cómo cuidar la decoración floral de una tumba según las estaciones?

La situación de la tumba determinará en gran medida la elección de la decoración, así como el tipo de cuidados requeridos por las flores del cementerio. Una buena opción puede ser una decoración arbustiva, ya que los arbustos, especialmente las pequeñas coníferas, son resistentes y requieren un mantenimiento mínimo. Sin embargo, no siempre es fácil determinar dónde plantarlos. Además, muchas especies de árboles están prohibidas en los cementerios debido al riesgo de degradación que presentan sus raíces para las lápidas. En todo caso, aunque los familiares del difunto elijan un arbusto poco invasivo, a ellos les corresponderá podarlo regularmente, para mantenerlo en el perímetro destinado a su sepultura.

Si la lápida es de granito y no tiene espacio para depositar tierra, o si se va a reabrir para alojar a un cónyuge o familiar en el futuro, es posible utilizar plantas en macetas o jardineras, aunque no hay que olvidar que tendrás que cuidar de la tumba de manera regular.

Una de las mayores dificultades es poder mantener cuidada la decoración de la tumba a medio y largo plazo. Para ello, la solución más eficaz es decantarse por una planta que requiera poco mantenimiento y sea capaz de soportar las diferentes estaciones. Los bulbos son perfectos en ese sentido: narcisos, tulipanes y azafranes, por ejemplo, florecerán sin problemas una vez sembrados.

Las plantas anuales y bianuales son ideales para decorar una tumba con flores, pero requieren más cuidados. Si utilizas pensamientos, margaritas o amapolas de California deberás remplazarlas periódicamente.
Si el tipo de tumba lo permite, enredaderas anuales como la madreselva son un bello adorno para ciertas cruces elegantes o para adornos de hierro forjado.

Algunas  plantas como la margarita, la lavanda o el iris aportarán un toque personal a la decoración de la tumba, siendo además muy resistentes durante todo el año. Por otra parte, el geranio o la acedera requieren unos cuidados mínimos y decoran cualquier superficie durante todo el año.

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¿Cuáles son las flores perfectas para Todos los Santos?

Sin duda, el crisantemo es la flor funeraria por excelencia, la más elegida en España y en otros países europeos como Francia para el “día de los muertos” o de Todos los Santos. Ese fin de semana se venden varios millones de tiestos con estas flores. Es el número 1 de las flores típicas para Todos los Santos. 

Otras plantas muy populares en este día son el ciclamen o el brezo, plantas simbólicas, resistentes y económicas, muy arraigadas en la tradición de esta celebración cristiana. Si quieres variar un poco tus plantas para decorar una tumba, puedes utilizar, por ejemplo, el eléboro, una planta muy vistosa que tiene la particularidad de apreciar el invierno.

Además, junto a los grandes clásicos de las composiciones florales, en los cementerios van apareciendo nuevas variedades, como la silkymia japonesa o la verónica, plantas cada vez más demandadas durante el Día de Todos los Santos por su resistencia y por sus magníficos colores. 

Como puedes ver, la elección de las plantas y flores para decorar una tumba ha evolucionado, aunque la simbología sigue intacta: honrar la memoria del difunto y transmitir todo nuestro cariño y respeto hacia aquellos que se fueron.

Hay muchos servicios de entrega de flores funerarias, capaces de proporcionarte muchas variedades de plantas y flores para tumba: anturios, flores blancas, flores de temporada, flores cortadas, flores secas, plantones, ramos, centros de flores para tumbas, etc… En general, si quieres enviar flores para un funeral o una corona a un cementerio, puedes especificar al florista dónde debe colocarlas: delante de la tumba o sobre ella, cerca de la placa funeraria, etc.

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